Ocho piezas del ajuar real que se exhiben en la Galería de Apolo del Museo Louvre en Francia fueron robadas en la mañana de este domingo 19 de octubre. El atraco ocurrió en el primer piso del ala Denon, en el sector conocido como Petite Galerie. La Policía francesa y equipos de la fiscalía de París investigan el hecho y la causa quedó caratulada por robo organizado y asociación delictiva.
La sustracción afectó objetos de la colección de la Corona francesa: diademas, collares, pares de pendientes y un broche relicario. El museo cerró sus puertas por 24 horas como medida de precaución mientras avanzaban las pericias. El Ministerio de Cultura calificó el valor de las piezas como «inestimable», señaló Rachida Dati, ministra de Cultura.
El episodio generó tensión inmediata en el museo y en el barrio. Testigos describieron vidrios rotos y personal del Louvre trabajando con peritos. Una de las diademas, perteneciente a la emperatriz Eugenia, apareció fuera del recinto con daños. La investigación busca determinar la ruta de fuga y la identidad de los responsables.
Qué se llevaron
El inventario oficial consignó ocho objetos pertenecientes al ajuar real exhibido en la Galería de Apolo. Figuran dos diademas, dos collares y dos pares de pendientes, además de un broche relicario, todos engastados con piedras preciosas.
Entre las piezas figuraban joyas ligadas a la reina María Amalia, a la reina Hortensia y a María Luisa, así como la diadema de la emperatriz Eugenia, que luego se halló dañada fuera del museo. El conjunto formaba parte de una colección clásica del tesoro monárquico francés.
El valor histórico y cultural de estas piezas excede su precio material. Las gemas y monturas integran tradiciones de siglos que se exhiben como patrimonio público del Estado francés.
1, 2 y 3. Collar, tiara y pendientes del conjunto de la Reina María Amelia y la Reina Hortensia, compuestos por 24 ejemplares de estas piedras preciosas azules, 10 de ellos muy pequeños, y 1.083 diamantes.

4 y 5. Collar y pendientes de esmeraldas del conjunto María Luisa, regalados por Napoleón en ocasión de su matrimonio. Compuestos por 32 esmeraldas, 10 de ellas en forma de pera, y 1.138 diamantes, con 874 brillantes y 264 rosas.

6. Tiara de la Emperatriz Eugenia de Montijo, compuesto por 212 perlas, incluidas 17 en forma de pera en la parte superior, 1.998 diamantes y 992 rosas.

7. Broche de corpiño de la Emperatriz Eugenia de Montijo, lazo con dos presillas y laterales plegados rematado con dos trenzas de longitudes desiguales y borlas de pasamanería con flecos articulados. En total, 2.438 diamantes y 196 rosas.

8. Broche relicario de la Reina María Luisa, compuesto por un total de 94 diamantes, siete que componen una roseta que rodea un solitario, mientras que otros dos están unidos por sus vértices y de ellos cuelgan cuatro más pequeños en forma de pera, y un brillante triangular alargado del que cuelgan otros dos y al que se adhiere un gran diamante ovoide.

Investigación en curso
La investigación policial indica que los asaltantes usaron una plataforma elevadora montada sobre un camión para forzar una ventana del primer piso. Entraron alrededor de la apertura al público, aproximadamente a las 9:30, y permanecieron en el interior cerca de siete minutos, según la pesquisa.
Durante ese corto lapso rompieron vitrinas y sustrajeron las joyas exhibidas. Luego huyeron en vehículos de dos ruedas. La rapidez del operativo evidencia planificación y cierto conocimiento del edificio.
La Brigada de Represión del Bandolerismo y la Oficina Central de Lucha contra el Tráfico de Bienes Culturales asumieron la pesquisa. La fiscalía abrió la causa por robo organizado y asociación delictiva.
La Galería de Apolo alberga casi 800 piezas vinculadas al tesoro de la monarquía, con piedras célebres como el Régent, el Sancy y el Hortensia, y monturas en oro y plata. El Régent, por ejemplo, fue descubierto en India en 1698 y figura entre los grandes diamantes históricos.
El gobierno de Macron subrayó la gravedad del robo y definió las piezas como «inestimable», señaló Rachida Dati, ministra de Cultura. Las autoridades subrayaron la necesidad de recuperar los objetos y preservar el patrimonio.
Por ahora, la única pieza recuperada ofrece una pista parcial: la diadema de la emperatriz Eugenia apareció dañada fuera del museo. La investigación continúa abierta y la expectativa pública apunta a la pronta restitución de las demás piezas.